lunes, 30 de abril de 2012

IDENTIDAD.


No existe nada más religioso que un humano en desgracia.



Las ideologías nacen con el propósito de cegar las ilusiones propias del hombre, cuyo objetivo último se convirtió en fe, podemos oír: tenemos fe de salir adelante, tenemos fe de encontrar un trabajo, de comprar propiedades, y la acción está sólo y simplemente en acabar con la idea, lastimosamente, la acción nunca va hacer ejecutada, porque la fe ha de volverse tan grande que creemos se ejecutará sola. 

El hombre ha sido preso de las diferentes y variadas ideologías de estado, una muy marcada, es como el hombre con su fuerza de trabajo pudo generar dinero, pero ¿Será que al capitalismo ha de interesarle esto? nunca. El hombre interiorizó el demandar dinero como fuente de riqueza, ¡Que riqueza! Si el dinero ganado sólo se hace con un objetivo y fin último, que el empleado crea tener la idea de estar siendo feliz o salir adelante, cuando el capitalismo lo único que hace con esto es cegar sus ideas y garantizar que el sujeto venga por mas recompensa mañana.

El tema de la fe, y ¿quiero acercarme a la respuesta de qué es fe? ¿Será posible? La primera dictadura de la iglesia, la fe divina. Buscando el significado de manera explícita se puede observar como ha sido un término implantado por la religión y la mitología bíblica, para llegar a un ser supremo nunca antes visto, es decir, creer en lo que no se ve.

El hombre lleva consigo el cargo de conciencia, cuando cree no haber correspondido el amor divino, considerando la manera más fácil, yendo al templo de salvación, adorando imágenes implantadas socialmente para que nuestras ideas asuman contemplación y nuestra conciencia salvación.

Será posible encontrar espiritualidad, si tenemos el concepto de ser humano libre, cuando la vida mundana asecha mi diario vivir, cuando somos seres más emocionales, que racionales, la emoción corroe cada instante, cada momento, cada aventura y hasta cada palabra, somos seres libres, que podemos morir mañana.

Hombres libres ¿y la fe?

Creo que encontramos la fe; creo hallarla en el sustento del pan de cada día y reprimirla en la búsqueda de la felicidad, es ahí donde siempre nace nuestra fe; la fe divina sólo la buscamos cuando tenemos un problema o sentimos miedo, nos refugiamos en oraciones y plegarias.

Nuestro medio nos vuelve seres para el consumo, consumimos siempre y a cada momento, satisfacemos nuestro vivir con lujos ¿Será que sobrevivimos? Sólo deseamos y compramos; no es una crítica al consumo simplemente es la realidad de lo que nuestra sobrevivencia se ha convertido, un verdadero manifiesto de poder, al llenar nuestras vidas de ostentaciones que muchas veces no necesitamos; en ciertos momentos como seres sociales debemos compartir con los demás y darnos gusto con algunos lujos que queremos y por los cuales quizá hemos trabajado, pero en la actualidad sólo lo hacemos queriendo disfrutar de la vida babilónica.

Inverosímil es pensar y mencionar la educación en un país del tercer mundo, o una educación que tiene pocas horas de ética en su currículo y rebosan las ciencias básicas, cuando en un país como éste nunca habrá investigación si no se soluciona primero las necesidades básicas del hombre (la vivienda, la salud, la alimentación, entre otros requisitos  de primer orden).

Las personas estamos más que educadas; condicionadas a ser lo que el resto de la sociedad quiere que seamos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario